El equipo asturiano defenderá su prototipo en los certámenes que se desarrollarán a finales de agosto en Italia y Barcelona
Cerca de 30 estudiantes de distintas ingenierías del Campus de Gijón han diseñado un monoplaza eléctrico con el que competirán por primera vez en el Fórmula Student, un concurso internacional que distingue los mejores proyectos en el campo de la automoción realizados por universitarios. El diseño asturiano, denominado Formula EPI, ha sido presentado esta mañana en el Aulario Sur del campus gijonés.
El modelo, un monoplaza eléctrico de dimensiones algo más reducidas que un fórmula estándar, es fruto de un año y medio de trabajo del equipo de estudiantes conocido como ImpulsEracing Formula Student Team Gijón. Los alumnos han realizado ya el diseño, previo a la construcción, de un prototipo no contaminante, con aerodinámica compensada y buena aceleración de cero a cien.
El coche se presentará oficialmente en las competiciones del Fórmula Student de Italia y Barcelona a finales del mes de agosto. Los estudiantes de la Universidad de Oviedo, que participan por primera vez en la competición, serán evaluados en función de diferentes pruebas estáticas y dinámicas que analizan aspectos como el diseño, el análisis de coste, el plan de negocios, la aceleración, resistencia o consumo del vehículo.
El Fórmula Student es la competición de estudiantes de universidades más prestigiosa del mundo en el campo de la automoción. Su objetivo es promover la excelencia en ingeniería a través de un concurso donde los miembros de cada equipo diseñan, construyen, desarrollan y prueban un monoplaza. El Fórmula Student es además el escenario ideal para que los estudiantes puedan exponer sus conocimientos ante las empresas más prestigiosas del sector.
El certamen, que comenzó a gestarse en Houston en 1979, se desarrolla actualmente en países como Alemania, Italia, Reino Unido, Japón, Brasil, o Australia, además de España. Los equipos participantes deben simular una situación real en la cual una empresa de competición contrata a ingenieros para desarrollar un prototipo. El monoplaza tiene que superar pruebas de aceleración, frenada, y estabilidad, además de ofrecer un mantenimiento fácil, barato y fiable.