Mañana martes, 18 de noviembre, a las 18 horas, en el Salón de actos de la Biblioteca de Humanidades, estamos convocados a una nueva sesión de 'El actor y su doble. Hacer visible lo invisible', el ciclo de demostraciones sobre el trabajo actoral que organiza la Universidad de Oviedo. Etelvino Vázquez, director del Aula de Teatro de la institución y de Teatro del Norte, tomará como eje de su actuación el uso de la voz en situación de representación. Entrada libre hasta completar aforo.
En este ciclo, destacados protagonistas de la escena contemporánea muestran al público los secretos de su oficio, su técnica, su modo de encarar el ejercicio escénico. Estas demostraciones nos permiten conocer el trabajo invisible que los intérpretes realizan antes de que comience la representación, hacer visibles los caminos secretos de la creación actoral, de modo que puedan ser comprendidos, aprendidos y llevados a la práctica. Revelando el trabajo no visible de grandes actores, tanto en registros cómicos como dramáticos, "El actor y su doble" enseña al público a leer el signo teatral de un modo más profundo.
Etelvino Vázquez: Las voces de la voz
La voz es la prolongación de nuestro cuerpo, en el mismo sentido que nuestros ojos, nuestras orejas y nuestras manos: es un órgano de nosotros mismos que nos prolonga hacia el exterior y que en el fondo es una especie de órgano material con el cual se puede tocar. Es posible, a través de ciertas asociaciones que no son intelectuales ni cerebrales sino simples a nivel del cuerpo, reencontrar una voz como una espada, una voz como un tubo, como un embudo; la voz es entonces aguda como una espada o larga y ancha como un tubo, como una fuerza material. Por eso, si se desea liberar la voz, no se debe trabajar con el aparato vocal; es decir, no hay que fijar la atención sobre el trabajo de los órganos vocales; se debe trabajar como si el cuerpo cantara, como si el cuerpo hablara (Jerzy Grotowski).
Con Las voces de la voz, Etelvino Vázquez muestra al público los diferentes usos que de la voz hablada hace el actor en situación de representación, sus modos y maneras, su técnica. Y esta demostración se hace mediante una serie de textos donde se ejemplifica la voz, tanto a nivel fonético como semántico, con fragmentos de Lorca, Valle-Inclán, Eduardo Galeano, etc., escenas que nos acercan al teatro desde la óptica del texto, de la palabra hablada, de la lengua castellana.
Etelvino Vázquez, licenciado en Filología Francesa por la Universidad de Oviedo y en Arte Dramático por la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla, participa como alumno en las sesiones de la ISTA, que dirige Eugenio Barba, en 1981 en Volterra, en 1988 en Portugal y en 2004 en Sevilla. Ha realizado cursos con Antonio Malonda, Yolanda Monreal, Esperanza Abad, José Carlos Plaza, Arnold Taraborrelli, Eugenio Barba, Tage Larsen, Roberta Carreri, Torgeir Wethal, Iben Ángel Rasmussen, Susana Bloch, Sanyuta Panigrai, Toni Cots, etc. Formó parte de la compañía Caterva de 1968 a 1977, y de Teatro Margen de 1978 a 1984. En 1985 creó la compañía Teatro del Norte, y desde entonces ha dirigido todos sus espectáculos, en los que ha intervenido también como actor, representando en España y en numerosos países. Como docente, ha impartido seminarios en España, Portugal, Brasil, USA, Italia, Egipto, Uruguay, Argentina, México y El Salvador. Entre 1986 y 1996 fue profesor de Interpretación en el Instituto del Teatro de Asturias. Ha dirigido también espectáculos para compañías de Galicia, Extremadura, País Vasco, Madrid y Andalucía, entre los que destacan Aquí no paga nadie y Una mujer sola, de Dario Fo; Perfume de mimosas y El pájaro de plata, de Miguel Murillo; El gran teatro del mundo, de Calderón de la Barca; El caballero de Olmedo, de Lope de Vega; Ubu rey y Siempre Ubu, de Alfred Jarry; Los dioses y los cuernos, de Alfonso Sastre; Fausto, de Marlowe; Cara de plata, de Valle-Inclán; o Las troyanas, de Eurípides. También ha dirigido la ópera Macbeth, de Verdi, en la Temporada de Ópera de Oviedo y de La Coruña. Entre los numerosos galardones conseguidos, destacan el Premio al Mejor Director de Teatro Profesional de Asturias en la I Gala del Teatro Asturiano (2000), el Premio Asturias de Teatro a toda su trayectoria (2001), el Premio Max al mejor espectáculo en lengua gallega con Emigrados (2008), Mejor Director por El alma de la melodía en los Premios HO! del Teatro Asturiano (2012) y Mejor Director por Mariana Pineda en los Premios HO! del Teatro Asturiano (2013).