La Memoria de responsabilidad social de 2018 de la Universidad muestra un avance hacia los objetivos de la Agenda 2030
Entre las mejoras constatadas se encuentran un mayor uso de las instalaciones deportivas, más puntos de recarga de vehículos eléctricos, el aumento de los convenios para la creación de cátedras y la reducción del tiempo que las personas egresadas necesitan para encontrar trabajo
El rector, Santiago García Granda, ha presentado esta mañana la segunda "Memoria de responsabilidad social. Nuevos compromisos con la Agenda 2030", en la que se recogen las principales acciones realizadas por la Universidad de Oviedo en 2018 en materia de docencia, investigación, transferencia y gestión, así como su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). García Granda ha estado acompañado de la directora de Área de Calidad y Agenda 2030, Pilar González Torre; la directora de Responsabilidad Social, Apoyo a la Inclusión e Igualdad, María Valvidares; y el director de Área de Cooperación con la Empresa y Empleabilidad, Enrique Covián.
El documento ofrece una comparativa de los datos de 2018 respecto al 2017, con el fin de que pueda constatarse la evolución que ha habido en los diferentes aspectos analizados. La memoria revela avances como un mayor uso de las instalaciones deportivas por parte de la comunidad universitaria, más puntos de recarga de vehículos eléctricos en los campus, el aumento de los convenios para la creación de cátedras o la reducción del tiempo transcurrido desde la finalización de los estudios hasta encontrar el primer trabajo, entre otros.
Otras cuestiones relacionadas con la sostenibilidad que se destacaron en la presentación son el hecho de potenciar cada año más las medidas de ahorro energético, apostando siempre que es posible por las energías renovables, y la plantación de 800 árboles en el Campus de Gijón/Xixón, que fue una de las acciones más votadas por la comunidad universitaria en los presupuestos participativos.
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