El doctor Alberto Orfao, científico del Centro de Investigación del Cáncer de la Universidad de Salamanca, y Fernando Martín Lara, director financiero de la empresa Cytognos, han recogido esta mañana el III Premio de Biomedicina Aplicada Valdés-Salas por su trabajo de innovación tecnológica en el screening diagnóstico, clasificación, evaluación de la respuesta al tratamiento y monitorización en prácticamente todos los subtipos diferentes de leucemias y linfomas. El Premio en Biomedicina Aplicada Valdés-Salas reconoce investigaciones utilizadas con éxito por una empresa, premiando así la colaboración estrecha entre el mundo empresarial y el científico.

 

El rector de la Universidad de Oviedo, Vicente Gotor, ha presidido el acto celebrado en el Paraninfo del Edificio Histórico acompañado por Miriam Cueto Pérez, directora general de Universidades del Principado de Asturias, el doctor Carlos López-Otín, presidente del jurado del galardón, y Francisco Rodríguez, presidente de ILAS-RENY PICOT y patrono de la Fundación Valdés-Salas. 

 

En torno a 900 instituciones en todo el mundo utilizan hoy en día el sistema de diagnóstico precoz y estandarizado de diagnóstico de leucemias y linfoma desarrollado gracias al trabajo del equipo del doctor Alberto Orfao y la empresa  Cytognos. "Éste no es un premio personal", señaló el doctor Orfao, quien destacó "la apuesta que la Universidad de Salamanca realizó a hace dos décadas por nuestro trabajo y también es un reconocimiento al esfuerzo de cada uno de los 60 investigadores que integran el equipo."

 

Por su parte, Fernando Martín Lara insistió en la especial relevancia del galardón al reconocer "que se acerque el conocimiento a las empresas, generando un modelo de financiación a la ciencia pública, que es muy necesario". En su intervención, Martín Lara defendió además que "el empresario debe anteponer la generación de riqueza a la rentabilidad cortoplacista."

 

El rector, Vicente Gotor, elogió la labor desarrollada por los galardonados y subrayó la importancia de que Universidad y empresa vayan de la mano para poder transferir el conocimiento generado en las instituciones a la sociedad. "Este premio es un buen ejemplo del potencial que tienen las Universidades en investigación y su empeño en transferir conocimiento", explicó Gotor, que aprovechó la ocasión para hacer extensiva su felicitación a la Universidad de Salamanca.

 

El catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Oviedo, Carlos López-Otín, presidió el jurado del galardón y destacó que los galardonados constituyen "un ejemplo realmente brillante de un trabajo surgido de la Universidad y hecho con rigor y compromiso para construir nuevos conceptos y generar riqueza." 

 

La labor que a lo largo de casi dos décadas han desarrollado conjuntamente el equipo del doctor Alberto Orfao y la empresa Cytognos ha tenido como fruto más de 50 patentes cuyos productos se comercializan en cinco continentes. La firma cuenta con una plantilla de más de 40 empleados.