Las diez universidades europeas integradas en la alianza Ingenum aprobaron ayer, en la reunión celebrada en el marco del Consejo de la Alianza en Chieti-Pescara, las cinco titulaciones en las que comenzarán a trabajar para potenciar su oferta académica conjunta. En concreto, han dado el visto bueno al que será el primer grado europeo de la alianza, que tratará sobre emprendimiento e innovación, así como a cinco másteres en materia de rehabilitación médica, inteligencia artificial, química y sostenibilidad. Además, los rectores presentes, presididos por el rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, han consensuado iniciar el proceso para dotar Ingenium de entidad legal. Para ello, comienza ahora un periodo de análisis y consultas de cada una de las universidades socias, que evaluarán internamente el modelo de Agrupación Europea de Cooperación Territorial.

Para la elección de las primeras titulaciones conjuntas, los rectores de las diez universidades que forman parte de la alianza europea han tenido en cuenta aquellas ramas de conocimiento que cuentan con presencia en un mayor número de instituciones. Tras este acuerdo, las universidades socias iniciarán el proceso para analizar las posibles vías de implementación de estas titulaciones conjuntas, involucrando al mayor número de instituciones posible. En concreto, las titulaciones seleccionadas incluyen el primer grado europeo Ingenium, sobre emprendimiento e innovación y que surge de una propuesta de la universidad alemana de Ciencias Aplicadas de Karlsruhe. En cuanto a los estudios de posgrado, se trabajará en la puesta en marcha de cuatro másteres, que se enmarcarán en las siguientes materias:la rehabilitación médica, la inteligencia artificial, la química y la sostenibilidad. 

“Estas titulaciones se priorizarán y se considerarán estratégicas para la Alianza, pero caminarán de forma paralela a otros programas de estudios que ya están desarrollados o a punto de finalizar con presencia de dos o más universidades socias y que se incluirán en la oferta académica de la alianza”, ha explicado Ignacio Villaverde. Ejemplo de esto son el Máster Erasmus Mundus en Mecatrónica; el grado en Derecho Internacional; el máster en Ciencias Cognitivas o el de Bienestar, desarrollados de forma conjunta por dos o más universidades Ingenium. 

Entidad legal

Resolver cuáles iban a ser los primeros pasos para seleccionar la entidad legal de la alianza era una de las cuestiones del orden del día del Consejo. La opción que gana enteros es la de constituirse como Agrupación Europea de Cooperación Territorial, una forma legal que, tal y como ha explicado Ignacio Villaverde, “posicionaría de forma inmediata a Ingenium como una alianza comprometida con la cooperación regional europea y la educación transnacional transformadora”. Esta entidad permitiría que Ingenium actúe de vehículo para aumentar la participación de las regiones en las que están establecidas las diez universidades que la conforman. 

El acuerdo alcanzado encomienda a cada una de las universidades socias que analicen de forma interna, en el marco de sus órganos de gobierno y de su legislación nacional, la posibilidad de optar por esta forma jurídica y los pasos que deben dar para ello. Todo ello se hará contando con el apoyo de la universidad coordinadora y el secretariado técnico de la alianza, que guiarán el proceso. 

Proyecto de lanzamiento de un nanosatélite

En cuanto a la propuesta de proyecto de lanzamiento de un nanosatélite de Ingenium, promovido por la Munster Technological University, los rectores presentes en el Consejo de la Alianza decidieron que cada una de las universidades que forman parte de la alianza canalizarán el proyecto a través de aquellos grupos de investigación que manifiesten su interés en sumarse a este proyecto. Una vez conocido el interés que este proyecto despierta en los grupos de investigación del consorcio, se trabajará para elaborar un proyecto conjunto. 

Firma de los principios de Campus Saludable y la Carta de Equidad e Inclusión

Por otra parte, las universidades socias firmaron en el encuentro de Chieti-Pescara los principios de Campus Saludable, diseñados para cumplir objetivos como reconocer la responsabilidad colectiva de abogar por lo comprendido en la Carta de Okanagan para Universidades y Colegios Promotores de la Salud, esforzarse por crear entornos de apoyo en el campus que conduzcan a una vida saludable, crear una cultura de bienestar y, por último, apoyar una perspectiva integral de cada universidad para la salud y el bienestar. 

Así mismo, los rectores también sellaron la carta de Equidad e Inclusión, con el objetivo de cumplir un decálogo que avance hacia la inclusión y la equidad con una lente más amplia e interseccional. Alguno de estos principios pasan por proporcionar oportunidades de educación y capacitación continuas para crear conciencia, conocimientos y habilidades relacionadas con la equidad, la diversidad y la inclusión, tanto para estudiantado como para PDI y PTGAS; integrar los principios de equidad, diversidad e inclusión en los planes de estudios; adoptar prácticas inclusivas en la contratación y la retención de talento, o participar activamente con las comunidades locales, nacionales y globales para promover la equidad.