template-browser-not-supported

Noticias

Ana Rossetti interviene en la Cátedra Ángel González

La escritora Ana Rossetti pronunciará el jueves, 25 de abril, a las 20 horas, en el Aula Severo Ochoa del Edificio Histórico (Oviedo/Uviéu), la conferencia 'Señales y muestras', organizada por la Cátedra Ángel González de la Universidad de Oviedo con la colaboración de la Fundación Banco Sabadell y la Consejería de Educación y Cultura del Principado de Asturias. El acto, que será presentado por Raquel Fernández Menéndez, poeta e investigadora de la Universidad de Oviedo, forma parte del ciclo 'Selección natural'. La entrada es libre hasta completar aforo.

Ana Rossetti (San Fernando, 1950), autora procedente del ámbito teatral, ha desarrollado su actividad en los campos del teatro, la poesía y la narrativa. En 1993 estrenó El secreto enamorado, ópera en un acto con música de Manuel Balboa. Ha hecho versiones de obras clásicas españolas para el Centro Andaluz de Teatro y la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Su obra poética ha sido reconocida con los premios Gules (1980) y el Premio Internacional Rey Juan Carlos I (1985). En narrativa ha publicado varias novelas y en 1991 obtuvo el premio La Sonrisa Vertical de literatura erótica. En 2003 forma el grupo Transtextuales, realizando la serie de performances "Los Miércoles de Crimen" para el Centro de Arte Moderno. Desde 1996 se dedica también a la literatura infantil. Tiene la Medalla de Plata de Andalucía al conjunto de su obra y el Premio Meridiana que otorga el Instituto Andaluz de la Mujer en la categoría de Literatura. Como poeta ha publicado los libros Los devaneos de Erato (1980), Dióscuros (1982), Devocionario (1986), Punto umbrío (1995 y 2019), Llenar tu nombre (2008), El mapa de la espera (2010) y Deudas contraídas (2015). Este último, editado por La Bella Varsovia, ha sido distinguido con el Premio "El Público" al mejor poemario de 2016.

 

Resumen: "En el principio los pintores, escultores, músicos y poetas eran artesanos. Pero es imposible seguir considerándonos así. Un artesano, en cuanto aprende a dominar su oficio, no necesita sino repetir la fórmula mientras disponga de las mismas herramientas para los mismos materiales. Pero, así como se aceleran los procesos de la Historia, cambian vertiginosamente nuestras experiencias y es preciso buscar otro instrumental y otros moldes. El arte es el reajuste necesario de la realidad, una inyección que vigoriza lo que la costumbre ha dejado de percibir. Trata de establecer otro sistema más coherente y eficaz con lo que necesita ser expresado; pero siempre será un sistema, con sus leyes y sus códigos definidos. Aunque lo que se quiera transmitir sea esa misma inestabilidad, solo puede hacerse mediante una norma reglada que inaugure un distinto orden de equivalencias. Así sucede que, aunque una obra no sea entendida al momento, puede ser aceptada en cuanto el público se haya familiarizado con el nuevo lenguaje. Un lenguaje, como el símbolo, consta de dos partes que, por muy particulares que estas sean, pueden encajarse y completar el dibujo. Por eso, para poder ser discernido, no puede fundarse en la arbitrariedad".