El Instituto Feijoo de Estudios del Siglo XVIII y el Seminariu de Filoloxía Asturiana rindieron un homenaje al profesor Álvaro Ruiz de la Peña en un acto que se celebró en el Paraninfo del Edificio Histórico de la Universidad de Oviedo, presidido por el vicerrector de Extensión Universitaria y Proyección Internacional y en el que se presentó el volumen "Estudios escogidos. Homenaje al profesor Álvaro Ruiz de la Peña Solar", editado por el Servicio de Publicaciones de la institución docente asturiana y que recoge una selección de artículos del filólogo.

 

Comenzó el turno de intervenciones el decano de la Facultad de Filosofía y Letras, José Antonio Gómez. Después tomaron la palabra la directora del Departamento de Filología Española, Serafina García; el coordinador del Seminariu de Filoloxía Asturiana, Ramón de Andrés; la directora del Instituto Feijoo de Estudios del siglo XVIII, Elena Lorenzo y el profesor de la Universidad de Cantabria, Ramón Maruri, que realizó una semblanza del homenajeado.

 

Álvaro Ruiz de la Peña reivindicó el sentido del humor y dijo que "aburrirse en compañía debería estar prohibido por el BOE" y aludió a la posibilidad  que da la labor académica  de trabar relación con figuras de larga trayectoria.

 

Cerró el acto el vicerrector de Extensión Universitaria y Proyección Internacional, que después de hacer llegar a los presentes un afectuoso saludo del Rector, que no puedo asistir por encontrarse acompañando a Carlos López-Otín en su investidura como doctor ‘honoris causa' por la Universidad Autónoma de Chile, dijo que "mis compañeras y compañeros de mesa han glosado de manera inmejorable la significación de Álvaro como investigador, y lo mucho que ha contribuido con su labor científica al prestigio de esta universidad en los estudios humanísticos. Basta observar el Instituto y su trayectoria para tener conciencia de ello. La alta estima en que sus colegas le tienen, muchos de trayectoria también encomiable, como los aquí presentes. O el cariño y la consideración con que me consta que le citan sus discípulos y discípulas".

 

Francisco José Borge aludió a lo mucho que debe Asturias y la Universidad de Oviedo a la familia Ruiz de la Peña en general y a Álvaro en concreto  por "su dedicación y, volviendo sobre aquel texto de 1981, su defensa de que el estudio pormenorizado de nuestra literatura nunca margine un texto por el hecho de estar escrito en castellano o en asturiano, sino por exigencias de calidad, fue y es una lección magistral acerca del buen hacer de una inteligencia rigurosa, honesta y escrupulosa. Qué decir del exhaustivo análisis que ha hecho de dichas obras y quienes las escribieron, desterrando viejos prejuicios y rompiendo silencios más o menos intencionados".

 

Terminó el vicerrector de Extensión Universitaria y Proyección Internacional parafraseando a Álvaro: "todos debemos echar una mano, ya que todos sudamos en la misma sextaferia. Y en esa búsqueda de nosotros mismos, tu ejemplo ha de servir de estímulo. Estoy seguro, y eso me alegra, de que vamos a seguir contando contigo, con tu capacidad, lucidez y talento. Y estos "Estudios escogidos" son una magnífica forma de hacerlo".